El 20 de abril es uno de esos días que son más que una simple fecha, sobre todo para los afortunados que tenemos pueblo. Cuando pasamos esta hoja en el calendario nos viene a la cabeza la homónima canción de Celtas Cortos, y con ella que «hoy no queda casi nadie de los de antes y los que hay han cambiado».
Tras un largo y frío invierno (vale, tan largo como cada año y, a consecuencia del calentamiento global, no muy frío), la Semana Santa nos ha sabido a poco y ya estamos deseando que llegue el veranito, y con él las fiestas populares y sus correspondientes verbenas; esas que nos retrotraen a aquellos tiempos en los que siendo un pelín más jóvenes nos dejábamos cuerpo y alma, entre otras cosas menos saludables, cantando y bailando.
Es cierto que en este tema concreto sí se puede afirmar sin miedo a equivocarse que tiempos pasados fueron mejores; hoy en día, amparados por la devastadora crisis económica, los ayuntamientos van sustituyendo paulatinamente las orquestas de toda la vida por disc-jockeys que, independientemente de sus gustos musicales, con frecuencia no gozan de mucho criterio a la hora de mezclar y en muchos casos demuestran un nulo talento para la animación.
Sin embargo, hay algunas cosas que felizmente nunca cambian; siempre hay un alto porcentaje de probabilidad de que en el repertorio, ya sea de músicos o de un dj, encontremos una serie de temas (en este caso en castellano) que se han convertido, más allá de si son o no de nuestros artistas favoritos, en parte de la banda sonora de nuestras vidas. Y no, no me refiero al Paquito, el chocolatero ni a ninguna canción del verano de Georgie Dann, que también, si no a la mencionada 20 de abril de Celtas Cortos y a muchas otras de la siguiente lista (*Aquí, la lista de reproducción de YouTube completa):
«20 de abril» y otras 24 míticas canciones de fiestas de pueblo:
1. Bienvenidos (Miguel Ríos)
Durante años fue un recurso muy habitual entre las orquestas que recorren la geografía española de fiesta en fiesta para comenzar su último pase, ese en el que los temas roqueros eran el denominador común; de ahí que se sitúe en primer lugar, antes del 20 de abril. «A los hijos del rock and roll, ¡bienvenidos!».
2. 20 de abril (Celtas Cortos)
«20 de abril del 90» es el encabezado de la melancólica carta ficticia que el vallisoletano Jesús Cifuentes le escribió a una vieja amiga, y que ha inspirado esta lista; no obstante, tal vez la frase que más dé que pensar sea «espero que mis palabras desordenen tu conciencia». Ésta es la versión orquestada de su último disco en vivo, In crecendo, que conmemora el 30º aniversario de la banda (del que ya hablamos aquí).
3. Cadillac solitario (Loquillo y los trogloditas)
El gran Sabino Méndez escribió para Loquillo una de las más míticas canciones en castellano que se recuerdan. Aún pone la piel de gallina oír al Loco gritarle a su «nena» de una manera tan desgarradora.
4. El roce de tu cuerpo (Platero y tú)
Puede que no sea la mejor composición de Platero y tú, pero su estribillo es el más memorable. Cuántos seremos los que en algún momento nos habremos sentido identificados con su letra: «no sé cómo comenzó la discusión ni a quién le toca ahora pedir perdón».
5. Chiquilla (Seguridad Social)
Todo un clásico de las verbenas populares que a uno le hace ponerse sentimental; sobretodo en esa parte deliciosa en la que dice «que las palabras se quedan cortas para decir todo lo que siento, pues mi chiquilla es lo más bonito del firmamento».
6. Maneras de vivir (Leño)
Al final de algunas fiestas de pueblo cobra especial sentido esa parte en la que dice «no sé si estoy en lo cierto, lo cierto es que estoy aquí, otros por menos se han muerto»; quién sabe si será por eso que siempre da buen rollo cada vez que vuelven a tocar este tema.
7. Insurreción (El último de la fila)
«Barras de bar, vertederos de amor…», algún puesto de comida y alguna caseta de juegos, y ya tenemos montada la fiesta. El videoclip no tiene desperdicio.
8. Dolores se llamaba Lola (Los suaves)
Otro clásico que no suele fallar. «Se fueron los buenos tiempos, la juventud ya se escapó», pero seguiremos siendo fieles a las fiestas de los pueblos, y seguirán alegrándonos los oídos muchas de estas canciones hasta que nos hagamos viejos.
9. Aquí no hay playa (The Refrescos)
Imagino que no tendrá tanto sentido cantar esta canción en fiestas de pueblos costeros como en los de montaña, pero… ¡vaya, vaya! Da ganas de bailar y cantar como pocas. El video corresponde a la nueva versión que grabaron en 2013.
10. El vals del obrero (Ska-P)
Tanto si te gusta Ska-P como si no, tanto si estás «orgulloso de estar entre el proletariado» como si no, seguro que alguna vez has sudado de lo lindo con ella.
11. En blanco y negro (Barricada)
Habitual de los bises en las verbenas y, como la anterior, muy de darse empujones unos a otros. Siempre es gracioso ver a toda clase de personajes bailando pogo a lo Sid Vicious, aunque una hora antes hicieran lo mismo con alguna de El canto del loco.
12. Pacto entre caballeros (Joaquín Sabina)
Está claro que Sabina es un gran letrista, pero además es capaz de sacarse de la manga este pedazo de rocanrol. Anda que no habremos gritado veces aquello de «mucha, mucha policía».
13. Salta (Tequila)
El de esta canción es sin duda uno de los títulos más apropiados, pues aunque la toquen al final de un concierto da inevitables ganas de saltar; y es mucho más efectivo para volver a casa sereno que cenar bien o que te atiborren de hielos el vaso del cubata.
14. Me duele la cara de ser tan guapo (Los inhumanos)
Hay que reconocer que tenían cara, no se si guapa o dura, pero mira que nos han hecho bailar; y cuántos grupos se habrán visto influenciados por su estilo. Tan pronto parodiaban melodías del oeste como las canciones de Grease. Por cierto, al final del video aparece Jordi Hurtado; su inmortalidad sí que es inhumana.
15. Ama, ama y ensancha el alma (Extremoduro)
No es santo de mi devoción, de ahí que no haya seleccionado alguna de las canciones de Extremoduro que se escuchan con frecuencia en las fiestas de los pueblos, y sí una que suena de vez en cuando y me gusta más. Inspirada en unos versos de Manolo Chinato, nos recuerda que no nos vendría mal abrir un poco más la mente de vez en cuando.
16. Felicidad (La cabra mecánica)
¡Ay! «Felicidad, qué bonito nombre tienes». ¡Ay! Y qué feliz es el ser humano cuando está de fiesta…
17. No dudaría (Antonio Flores)
Cuando llega el momento de poner un poco tierno al público, y que motivados por la ingesta de alcohol se produzcan todo tipo de exaltaciones de la amistad entre la concurrencia de la Plaza Mayor, suele recurrirse a esta bonita canción de Antonio Flores. Su estribillo: «Prometo ver la alegría, escarmentar de la experiencia, pero nunca, nunca más usar la violencia».
18. Maldito duende (Héroes del silencio)
«He oído que la noche es toda magia y que el duende te invita a soñar…». Ya nos gustaba cantarla antes incluso de entender perfectamente su letra. Durante unos años los Héroes formaron parte del repertorio de las orquestas con frecuencia, aunque poco a poco se fueron silenciando.
19. Camino de la cama (Siniestro total)
Inolvidable ese estribillo que dice «camino de la cama es el mejor camino, sólo estar durmiendo es mejor que estar dormido». Creo que no hace falta decir más.
20. Marihuana (Porretas)
Es un hecho que la letra no está muy trabajada, pero no hay duda de que el estribillo es muy pegadizo; y ver bailarla como locos a unos cuantos niños pijos que renegaban de su consumo mientras se hinchaban a garrafón y a coca no tenía precio. A propósito, el 20 de abril se celebra el Día mundial del cannabis.
21. Mi agüita amarilla (Los toreros muertos)
Qué cachonda la explicación de Pablo Carbonell, cual profesor de escuela, del recorrido que sigue su «agüita amarilla» una vez que tiene la necesidad de hacer hueco para más cervezas durante las fiestas de su pueblo.
22. Siempre que quiera (Muchachito Bombo Infierno)
Esta es una de las últimas en llegar al repertorio habitual de las verbenas, no obstante, llegó con mucha fuerza; tanta que es frecuente ver corearla y gritar su famoso «ojala no te hubiera conocido nunca» a gente que nunca ha escuchado ninguna canción del músico colomense.
23. Hormigón, mujeres y alcohol (Ramoncín)
Esta en cambio sí que ha sonado tanto en las fiestas de los pueblos (no en vano es de 1980) que ya hace tiempo que resulta muy aburrido oírla; sin embargo, lógicamente no podía faltar en esta lista.
24. Años 80 (Los piratas)
Una canción que rememora aquellos años 80 en los que las verbenas populares comenzaron su época de máximo esplendor; aunque no hable concretamente de ellas.
25. Agradecido (Rosendo)
Si el señor Mercado ya nos había regalado unos cuantos himnos del rock urbano nacional al frente de Leño, en solitario no se iba a quedar atrás. Quizás esta no sea tan habitual, es más bien un capricho personal, pero qué hay mejor para concluir una lista como esta que sentirse agradecido por tantos buenos momentos vividos en las fiestas de los pueblos.
Seguramente se hayan quedado fuera muchas canciones muy repetidas en las verbenas y que para alguno de vosotros sean especiales; no dudéis en mejorar esta lista añadiéndolas más abajo a los comentarios. ¡Que el verano llegue pronto para poder disfrutar cuanto antes de sus fiestas populares!
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¡Viva la fiestaaaa!
¡Viva!
Hay unas cuantas de mis canciones favoritas. Falta alguna de las que siempre tocan en mi pueblo. «Vicio» de Reincidentes, «Txus» de La Polla…
¡Gracias por la aportación! Ambas formaban parte de una lista preliminar. Era muy larga y hubo que recortar. Quizás para una segunda parte… 😉
Muy bueno 🙂
¡Muchas gracias!
Ya me has hecho sentir en agosto y todavía queda demasiado…Gran selección, sin duda otra de las que siempre está es «Fiesta pagana», pese a que sea seguramente uno de los momentos adecuados para visitar la barra o ir a miccionar
¡Gracias! ¿Se deberá tu sugerencia a que en tus tiempos mozos te codeabas con los Mägo de Oz? 😉
Y el tractor amarillo???
Je… Esa ya la dejaría para una tercera parte, junto a «El tiburón» y el «Follow The Leader»…